Un Comienzo improvisado... ¿Un futuro desconocido...?

Dicen los que saben que del pasado se puede entender el presente y discernir el futuro...

A diferencia de los saberes comprendidos en la currícula escolar, la incorporación de la informática fue impuesta en la institución con el fin de ganar prestigio. Dicha imposición de la sociedad surgió sin proyecto educativo, sin una “identidad propia”. Por ende, su ingreso estuvo asociado a los contenidos y a la didáctica de otras disciplinas.
En nuestro país el uso de las computadoras se incorporó a principios de los años 80. Impartida por Técnicos y Analistas de Sistemas ya que para utilizar las primeras maquinas que llegaron a las aulas era necesario saber programación, además de recordar términos en Ingles y obviamente en esos tiempos no existía la interfaz grafica conocida hoy en día. Todo se manejaba en modo texto. Piensen que los educadores estaban acostumbrados a trabajar con láminas, pizarrón y otros materiales didácticos muy distintos. Con este panorama los docente recibieron una capacitación de informática muy limitada, en contenidos y en acceso a las computadoras.
La sociedad progresivamente tomaba conciencia de la importancia de la informática, y de la brecha que generaba entre los "Analfabetos informáticos" y los que accedían a una computadora. Se buscaron alternativas para enmendar esta situación, como la utilización de programas de alta valoración en el mercado y ante los ojos de los adultos. Esta modalidad no hace más que agregar un nuevo instrumento a un procedimiento educativo que prácticamente no había variado desde el Medioevo.
En la actualidad todavía se sigue trabajando para revertir esta realidad, pues los acelerados avances tecnológicos superan todo planeamiento. Haciéndolo ver siempre, como inacabado.
Estamos seguros de que equivocadamente hemos transmitido de forma implícita a los alumnos, la idea de que pueden “acumular” conocimientos valiosos a la manera de un banco, en el que depositan saberes para cuando salgan de la escuela. La alternativa apunta, a la reflexión de problemas planteados como desafíos, la ciencia hecha y las formulas estarán a disposición de todos, la actividad escolar será la de investigar “nuevas soluciones”.
Está bien que los alumnos sepan manejar un procesador de textos. Pero sería mejor que entendiesen y pensaran en términos de funciones básicas, de esta manera i la costumbre de aprovechar lo que se tiene, en lugar de quejarnos por lo que no tenemos, estamos equivocados al pensar que si no contamos con una PC de última generación quedaremos fuera del sistema educativo moderno, no pretendemos con esto decir que trabajemos con computadoras de cartón. Es sumamente importante hacer esta distinción para transmitirlo a nuestros alumnos, a sus padres y nuestros superiores en las instituciones.
Queda en claro que la función de la informática es mejorar la calidad educativa y no adornar el perfil de la institución.
Hoy estamos viviendo una crisis en la educación. La institución que debería ser la vanguardia de todas las instituciones sociales, la que debería ir a la cabeza de la cultura, se encuentra en la retaguardia de nuestra intrincada y contradictoria sociedad cambiante...
Por lo tanto, no es extraño que la computadora no se haya incorporado plenamente a la educación moderna. Para muchos es apenas un instrumento que conviene tener por imposición social. No sé a logrado renovar hasta hoy del Sistema Educativo, los viejos hábitos de la enseñanza y del aprendizaje heredados del siglo pasado... aun así, existen instituciones educativas que duramente trabajan aportando su granito de arena para producir un cambio. Los cambios no ocurren con rapidez, pero se dan. Depende de cada uno de nosotros, ya sea como docentes o como futuros profesores, trabajar para alcanzar ese cambio que tanto anhelamos... Que por fin la Educación sea lo que debe ser, y le otorgue a la informática el lugar que le corresponde como disciplina transversal a la currícula Institucional...